La Petición de Salomón Valor: Sabiduría

“Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie.”

– Santiago 1:5:

Salomón era hijo de David y se convirtió en el rey sucesor de su padre. En 1 de Reyes 3:1-2 nos muestra que era un hombre temeroso de Dios que hacía sacrificios para Dios en lugares altos. En 1 Reyes 3:3-15 podemos ver que un día cuando Salomón subió a hacer sacrificios para Dios, en medio de un sueño Dios le habla y le pregunta que quería que Dios le diera. A lo que Salomón le contesta, que él era muy joven y quería discernimiento para saber gobernar correctamente. Salomón pudo haberle pedido muchos años de vida, bienes o riquezas, pero en su corazón había un anhelo por gobernar correctamente a su pueblo. Por lo que Dios al ver su corazón humilde y desinteresado le concedió a Salomón sabiduría como anhelaba, pero además le dio riquezas como ningún otro, y largura de días. En medio de su gobierno tuvo que enfrentar situaciones difíciles en las cuales necesitó la sabiduría de Dios para actuar correctamente. Una de estas situaciones fue la de 2 mujeres que dieron a luz en la misma casa. Ambas, fueron donde el Rey Salomón alegando que uno de los bebés murió asfixiado debajo de su madre y ésta tomó a su bebé y lo cambió con el bebé de la otra mujer cuando dormían. Al levantarse se da cuenta que el bebé estaba muerto y que no era su bebé sino el de la otra mujer.(1 Reyes 3:16-22)

Salomón pide que le traigan una espada y manda a cortar al bebé vivo por la mitad y le entregaría una mitad a cada madre. A lo cual inmediatamente una de las mujeres le pidió que no lo hiciera, que le entregara el bebé a la otra mujer, mientras ésta totalmente despreocupada le dijo que lo partiera por la mitad. Allí pudo Salomón darse cuenta quién era la verdadera madre del bebé viendo su preocupación porque no se le hiciera daño. Y el pueblo vió como Salomón gobernaba con gran sabiduría de Dios.(1 Reyes 3:23-28).

Así que a través de la vida de Salomón, podemos ver lo importante que es para nosotros buscar la sabiduría y el discernimiento de Dios para tomar nuestras decisiones. Muchas veces en nuestra vida tendremos decisiones difíciles que no sabremos qué hacer. Es ahí, en dónde más que actuar en nuestro propio entendimiento, necesitamos buscar la sabiduría de Dios para tomar las mejores decisiones. Si buscamos Su rostro, Él nos ayudará y nos mostrará el mejor camino que debemos tomar.

¿Qué es sabiduría? La sabiduría es un carácter que se desarrolla con la aplicación de la inteligencia en la experiencia propia.   Haciendo conclusiones que nos dan un mayor entendimiento, que a su vez nos capacitan para reflexionar.  La sabiduría nos ayuda a llegar a conclusiones que nos dan entendimiento de la verdad, lo bueno y lo malo. La mejor sabiduría es la que obtenemos por medio de Dios y el discernimiento que nos dá Su Espíritu Santo.

Versículos sobre sabiduría:

1) Proverbios 2:6: “Porque el Señor da la sabiduría; conocimiento y ciencia brotan de sus labios.

2) Efesios 5:15-16: “Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos.”

3) Santiago 1:5: “Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie.”

4) Santiago 3:17: “En cambio, la sabiduría que desciende del cielo es ante todo pura, y además pacífica, bondadosa, dócil, llena de compasión y de buenos frutos, imparcial y sincera.”