No te Preocupes, Dios Siempre Cuida de sus Hijos

“De Nada Sirve Preocuparse”             

– Mateo 6:25-34 NVI

El otro día conversábamos con un amigo cristiano sobre el pasado año. Señalábamos sobre lo perjudicial y complicado que fue para muchas personas. Sin embargo, nuestro amigo nos indicó que para él fue un año de bendición. Nos explicó que desde que llegó a los Estados Unidos, hace 7 años, trabajó incansablemente para poder sacar a su familia adelante. Comentó que en ocasiones tuvo dos y hasta tres trabajos. Entonces, ahora perdió su trabajo desde marzo de 2020, y fue desde ese momento que ha podido disfrutar a su familia y tener tiempo de calidad con ellos. Manifestó que, aunque se quedó sin trabajo, Dios les ha suplido de todas sus necesidades durante todo este tiempo, y desde entonces, ni un solo día, les ha faltado un plato de comida en su casa.   

Si nuestro amigo se encontrara una persona que haya tenido un mal año y le aconseja que no se afane, ni se angustie, que solo confíe, probablemente esa otra persona no lo vea de la misma manera que él lo ve o no lo entienda de la misma manera que nuestro amigo percibió el año. Pero en realidad eso es precisamente lo que Jesús nos dice en su palabra: de nada sirve preocuparse, lo más importante es que primero busquen el reino de Dios y hagan lo que es justo. Así, Dios les proporcionará todo lo que necesiten (Mateo 6:25-34 NVI). Está claro que, si hacemos lo que Dios quiere no hay porqué preocuparnos ya que él nos proveerá todo lo que necesitamos. Dios lo ha prometido y en él debemos confiar. 

¿Por qué debemos confiar en las promesas de Dios? 

• Porque Dios es fiel

• Porque Dios es todopoderoso

• Porque Dios es omnipotente

• Porque para Dios todo es posible

El Señor nos dice que no nos preocupemos por nuestra vida, nuestra comida y bebida y nuestro vestido (Mateo 6:25). Aunque ciertamente hay que tener claro que el Señor no nos está enseñando a ser irresponsable o perezosos. Las sagradas escrituras en ningún momento indican que no tenemos que trabajar, ni que debemos ser perezosos, por el contrario, estas nos declaran que la pereza es pecado (Proverbios 6:6, 21:25, 26:14). 

Lo que sí nos explica Mateo 6 versículos 25 al 32 y 34 son varias razones por las cuales no debemos preocuparnos. Por ejemplo, Dios siempre cuidará de nosotros pues somos más valiosos que la creación a la cual Él también cuida. También nos manifiesta que nuestra esperanza debe estar depositada en Dios y no en el mundo. Y finalmente, indica que de nada vale preocuparse pues la ansiedad es completamente inútil y absurdo. 

Para concluir en Mateo 6:33, Jesús nos señala que solo hay una cosa por la cual si debemos preocuparnos y esta es: buscar el reino de Dios y su justicia. 

Bendiciones

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