fbpx

Alineándome a tu Voluntad

nicholas-bartos-BJV5MF95KA0-unsplash
Alejandra N. Valentín Romero

Alejandra N. Valentín Romero

Versículo guía: Salmos 143:10

  • Enséñame a hacer tu voluntad, porque tu eres mi Dios, tu buen Espíritu me guie a tierra firme.

Nosotros como cristianos, tenemos que siempre tener presente la voluntad de Dios en nuestras vidas; aún mas en nuestra juventud, donde el enemigo de nuestras almas se levanta grandemente. Cada uno de nosotros sabemos cuáles son nuestras debilidades o en qué áreas de nuestras vidas fallamos; y así como nosotros las sabemos las sabe Dios, pero también las sabe el enemigo. Satanás siempre va a tratar de hacerte caer, y el sabe como hacer las cosas; pero más grande es nuestro Padre celestial, que esta en los cielos. Si entregamos nuestras cargas a Dios, y permitimos que el sea quien dirija nuestras vidas, el enemigo no va a poder hacernos daño, ya que Dios ha dado autoridad sobre de sus hijos.

Lucas 10:19

  • Sí, les he dado autoridad a ustedes para pisotear serpientes y escorpiones y vencer todo el poder del enemigo; nada les podrá hacer daño.

Lucas 9:1

  • Habiendo reunido a los doce, Jesús les dio poder y autoridad para expulsar a todos los demonios y para sanar enfermedades.

Dios nos ha dado libre albedrío, la potestad de tomar nuestras propias decisiones libremente, claro sabiendo por nuestra cuenta que tenemos que enfrentar las consecuencias, tanto buenas como malas. A pesar de que Dios nos dio el libre albedrío, por amor y misericordia a nosotros, nos da la oportunidad de que nosotros entreguemos nuestras acciones a él y que él dirija nuestros pasos. Muchas veces pensamos que lo sabemos todo, o que la decisión que yo tome me va a beneficiar, pero realmente solo Dios conoce los que nos conviene. De hecho, esos son los planes que el tiene para cada uno de nosotros, lo que nos conviene. Él no quiere el mal para nosotros sino el bien siempre. Su palabra dice en Isaías 55:9 dice: “Mis caminos y pensamientos son mas altos que lo de ustedes; ¡más altos que los cielos sobre la tierra! Algunos podrían pensar que Dios no quiere lo mejor para nosotros, ó, que él no escucha nuestras peticiones, porque seguimos teniendo pruebas y no alcanzamos lo que queremos. Si tan solo pudiéramos entender que las pruebas son una bendición, ya que es el proceso que Dios utiliza para hacernos crecer espiritualmente y para traer bendición a nuestras vidas. Si, es fácil de decirlo, pero difícil al momento en que estamos pasando por el proceso; pero les aseguro que Dios se va a glorificar de gran manera; claro, si entregas a él tu vida, y dejas que él dirija tus caminos.

Compártelo