Dios Transforma Lo Negativo En Algo Positivo

«Ustedes pensaron hacerme mal, pero Dios cambió ese mal en bien para hacer lo que hoy vemos: para salvar la vida de mucha gente.»

– Génesis 50:20

Por naturaleza el ser humano tiende a ser egoísta, insensible y arrogante.  Es por ello que, como parte de nuestro proceso  para lograr lo que Dios nos ha llamado a hacer tenemos que vivir ciertas experiencias que nos sensibilizan, nos hace empáticos y humildes ante la necesidad y el dolor.  

¿Cómo puedes hablar con alguien referente al dolor y la necesidad si nunca lo has vivido?  ¿Cómo puedes aconsejar a alguien en medio de su dificultad si nunca has tenido momentos difíciles?  ¿Cómo puedes hablar de la ayuda milagrosa o fortaleza que Dios te ha dado si nunca lo has experimentado? 

Dios permite que pasemos por esas circunstancias para que así podamos tener el corazón que Dios quiere que tengamos.  Un corazón sensible, humilde y dispuesto a ayudar.

Es por ello que la Biblia nos insta a través de 1era Corintios 3:18 a que no nos engañemos creyéndonos  saberlo todo y que por el contrario reconozcamos nuestra ignorancia y debilidad.

Nadie se engañe a sí mismo; si alguno entre vosotros se cree sabio en este siglo, hágase ignorante, para que llegue a ser sabio. 1 Corintios 3:18

En la Biblia hay muchas historias de hombres y mujeres que fueron procesados a través de la calamidad, persecución, abandono, engaño, pérdida y traición, entre otras; antes de ver el cumplimiento de su propósito.  Es importante que entendamos este principio espiritual para que no llenemos nuestro corazón de amargura, ante las situaciones difíciles de la vida.   Debemos tener el entendimiento y la visión que tuvo José, cuando dijo:

«Ustedes pensaron hacerme mal, pero Dios cambió ese mal en bien para hacer lo que hoy vemos: para salvar la vida de mucha gente.» Génesis 50:20

Puede que haya personas que nos hayan querido hacer mal.  Puede que simplemente hemos vivido situaciones difíciles en la vida.  No importa cuál sea la situación, lo que estoy segura es que todo ese mal Dios lo cambia para bien. Dios lo utiliza para salvar la vida de muchas personas.  En el tiempo de José salvó la vida a través del alimento físico.  Hoy puedes estar salvando la vida de otros a través de tu testimonio, tus vivencias y experiencias.  

No te amargues por lo que pasó.  Utilízalo para salvar la vida de otros.  No te desalientes por la calamidad, persecución y abandono que hayas vivido.  Cobra fuerzas para que ayudes a otros en medio de esos procesos.  

José vió claramente el propósito de Dios en su vida a través de cada una de las situaciones difíciles que vivió.  

«Así, pues, no me enviasteis acá vosotros, sino Dios,…»  Génesis 45:8

Espero que tú también  puedas ver a Dios a través de tus procesos difíciles.

Recuerda: 

Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de quienes lo aman y son llamados según el propósito que él tiene para ellos. Romanos 8:28 

Bendiciones.

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