fbpx

El Centro de la Vida: El Amor

El amor de Dios
Dra. Moraima De Hoyos-Ruperto

Dra. Moraima De Hoyos-Ruperto

«Pues Dios amó tanto al mundo que dio[a] a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.»
– Juan 3:16 (NTV)
Hace un tiempo me habían dado la encomienda de hablar en un panel referente a la familia, pero particularmente sobre la crianza de los hijos. Tan pronto me dijeron eso, mi cerebro comenzó a establecer todas las razones por las cuales yo no era la persona más adecuada para hacer semejante diálogo. 
En este momento de mi vida tengo cuatro adolescentes en mi casa y, como cualquier padre que tenga o haya tenido adolescentes sabe, ello es como caminar sobre un campo minado.  Sin embargo, el tener que prepararme para el panel, (porque no tuve forma de escaparme de ello, aunque era mi deseo) me hizo reflexionar sobre cómo Dios me ha ayudado a llegar hasta aquí (Ebenezer; 1era Samuel 7:12), aun en medio de mi debilidad y muchas veces mi sentimiento de impotencia. 
Llegué a la conclusión que aun en medio de mi imperfección, Dios me ha ayudado en la tarea que considero la más ardua de mi vida y que el centro de toda esta tarea es El Amor.  Y tiene que ser así, porque esa es la esencia de nuestro Dios (1era Juan 4:7-9).  No hay otra forma de cumplir esta tarea que no sea dándonos en amor como el propio Padre Celestial hizo con nosotros al darnos su hijo para morir por nuestros pecados, lo cual hizo sólo por AMOR (Juan 3:16).

Reflexión Recomendada: Verbaliza Tu Amor

 

Compártelo