fbpx

Haciendo la Voluntad de Dios con Agrado

Voluntad de Dios
Sandra Quiñones Barriera

Sandra Quiñones Barriera

El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado y tu ley está en medio de mi corazón.
– Salmos 40:8
Recientemente fui invitada a una boda que había escogido un color particular para sus invitados.  Recordé que tenía un ajuar de ese color y no lo verifique, simplemente confié que todo estaría bien.  Llegado el día, cuando busqué la pieza me di cuenta que aunque era muy hermosa y tenía los tonos de la actividad no me sentaba bien el estilo para ese evento.   Lo había comprado hacía unos años atrás para ir a una actividad en la playa, en un viaje que realizamos, pero realmente no me sentía cómoda con esa pieza.  Como no tenía tiempo para adquirir otra pieza, termine añadiendo un sobrepuesto y cambie completamente el estilo de la ropa.
Traigo esto, porque cuando entramos a este caminar de hacer la voluntad de Dios, entramos también en un crecimiento espiritual y Dios pone, a través de su Espíritu Santo, el agrandarlo con nuestro comportamiento.  Esto lo hacemos con gozo y no nos molesta.  Es nuestra forma de mostrar nuestro crecimiento integral que va desde el cambio transformador de nuestra mente y corazón, hasta lo más sencillo como cambiar nuestra manera de vestir y de comportarnos.   
¿Por qué ocurre esto?
Porque nos hemos convertido en cartas abiertas al mundo que mediante nuestro testimonio queremos expresar lo agradecido que estamos por todas las maravillas que Dios ha traído a nuestra vida.   Maravillas que son tantas que no las podemos contar.   Solo podemos testificar al mundo lo bueno que ha sido Dios con nosotros.
Quiero que sepas algo muy importante, hay algo que tenemos que entender y descubrir en nuestra vida:  Cuando miro hacia atrás y veo la película de mi vida que no ha sido perfecta, pero a pesar de eso tengo que expresar que el Dios Perfecto, Soberano, Proveedor, Sanador, Consolador y …( en este momento puedes añadir otros nombres de lo que Dios ha sido para ti)  SIEMPRE, SIEMPRE, SIEMPRE ha estado presente.  Razón suficiente para repetir el cántico que está en el Salmo 40: 1-8, particularmente el versículo 8:  El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado y tu ley está en medio de mi corazón.
Te invito a que te deleites con Salmos 40:1-8  (NTV)
Para el director del coro: salmo de David.
40 Con paciencia esperé que el Señor me ayudará,
    y él se fijó en mí y oyó mi clamor.
Me sacó del foso de desesperación,
    del lodo y del fango.
Puso mis pies sobre suelo firme
    y a medida que yo caminaba, me estabilizó.
Me dio un canto nuevo para entonar,
    un himno de alabanza a nuestro Dios.
Muchos verán lo que él hizo y quedarán asombrados;
    pondrán su confianza en el Señor.
Ah, qué alegría para los que confían en el Señor,
    los que no confían en los orgullosos
    ni en aquellos que rinden culto a ídolos.
Oh Señor mi Dios, has realizado muchas maravillas a nuestro favor.
    Son tantos tus planes para nosotros que resulta imposible enumerarlos.
    No hay nadie como tú.
Si tratara de mencionar todas tus obras maravillosas,
    no terminaría jamás.
No te deleitas en los sacrificios ni en las ofrendas.
    Ahora que me hiciste escuchar, finalmente comprendo:[a]
    tú no exiges ofrendas quemadas ni ofrendas por el pecado.
Entonces dije: «Aquí estoy.
    Como está escrito acerca de mí en las Escrituras:
me complace hacer tu voluntad, Dios mío,
    pues tus enseñanzas están escritas en mi corazón».
Oración: Doy honra y gloria a tu nombre por lo que hiciste, haces y harás en mi vida.  Que nuestras razones para adorarte sean tantas que nos complazca hacer tu voluntad y que tus enseñanzas queden grabadas por siempre en nuestro corazón; que no olvidemos ninguno de tus beneficios. Amen.

Reflexión Recomendada: Firmes por Siempre

Compártelo

1 comentario en “Haciendo la Voluntad de Dios con Agrado”

  1. Maravilloso y Misericordioso es nuestro Dios, que nos bendice y nos estabiliza mientras caminamos. Aleluya!

Los comentarios están cerrados.