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Salmos 37: La Paciencia Nos Perfecciona

La Paciencia Nos Perfecciona
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Dra. Moraima De Hoyos-Ruperto

«Así que dejen que crezca [la paciencia], pues una vez que su constancia [paciencia] se haya desarrollado plenamente, serán perfectos y completos, y no les faltará nada.»
– Santiago 1:4 
7 Calla en presencia de Dios,
y espera paciente a que actúe;
no te enojes
por causa de los que prosperan
ni por los que hacen planes malvados.
8 No des lugar al enojo
ni te dejes llevar por la ira;
eso es lo peor que puedes hacer.
9 Los malvados serán destruidos,
pero los que esperan en Dios
recibirán la tierra prometida. (Salmos 37:7-9)
La Biblia nos habla en varias instancias sobre esperar pacientemente en Dios. Pero, la paciencia es uno de los dones que la mayoría de nosotros no tenemos ( o por lo menos hablo de mí ). ¿Qué es la paciencia?  Según la palabra o originalmente utilizada en el hebreo paciencia significa firmeza, constancia, resistencia, perseverancia.  Según el diccionario bíblico la paciencia es la cualidad de resistir con firmeza, con la confiada expectativa de un fin deseado, a pesar de las dificultades, del desánimo y de las circunstancias desalentadoras que a menudo sufrimos.
 ¿A quien le gusta eso?  
¿A quien le gusta esperar  y enfrentar con confianza circunstancia desalentadoras?   
Con sinceridad, a nadie.  
Entonces, ¿por qué Dios nos manda a ser pacientes? Una de las razones es que nosotros como seres humanos tenemos la mente finita y no conocemos los planes y propósitos de Dios.  En medio de nuestro esperar, Dios puede estar trabajando, no solo con nosotros, sino con los demás.  Otra razón es que la biblia en Santiago 1:3-4 dice que la paciencia o constancia (según la versión NTV) se desarrolla, perfecciona y nos hace completos. 
3 porque ustedes saben que, siempre que se pone a prueba la fe, la constancia [paciencia] tiene una oportunidad para desarrollarse. 4 Así que dejen que crezca, pues una vez que su constancia [paciencia] se haya desarrollado plenamente, serán perfectos y completos, y no les faltará nada. Santiago 1:3-4 
Así de importante es la paciencia.   Quiere decir, que sin la paciencia no estamos completos.  ¿Cómo se desarrolla?  Practicando.  ¿Cómo se práctica ?  Poniéndola a prueba.  En términos educativos modernos eso se llama: “Learning by doing” / Aprender haciendo.  Por cierto, los investigadores en estos temas de aprendizaje dicen que esta es la mejor forma de aprender.  
En Santiago 1:2 nos dice que debemos alegrarnos cuando tenemos situaciones difíciles, porque estamos siendo probados, perfeccionados y completados en la paciencia, para así estar listos para la labor que Dios nos tiene designada en su Reino.
Amados hermanos, cuando tengan que enfrentar cualquier tipo de problemas, considérenlo como un tiempo para alegrarse mucho.  (Santiago 1:2)
Por lo tanto, si te sientes en prueba y accionando la paciencia, alégrate, el propósito de Dios se está cumpliendo en tu vida.  
Volviendo a los versículos base de la reflexión de hoy debemos examinar otros detalles.  
7 Calla en presencia de Dios,
y espera paciente a que actúe;
no te enojes
por causa de los que prosperan
ni por los que hacen planes malvados.
8 No des lugar al enojo
ni te dejes llevar por la ira;
eso es lo peor que puedes hacer.
9 Los malvados serán destruidos,
pero los que esperan en Dios
recibirán la tierra prometida. (Salmos 37:7-9)
  1. Hay momentos que es importante y necesario callar.
  2. Hay momentos donde es importante y necesario simplemente esperar pacientemente a que Dios actúe.
  3. Nuevamente, nos exhorta a que no permitamos que lo que vemos nos cause enojo, ni ira en nuestro corazón.
Entonces, 
  1. veremos cómo los malvados son destruidos, por Dios mismo.
  2. Recibiremos la tierra prometida.
¿Cuál es tu tierra prometida?  La restauración de tu hogar, familia, salud, trabajo, finanzas….  ¿Qué es lo que tanto estás esperando que Dios te conceda? ¿Cuál es el mayor deseo de tu corazón?  Si está alineado a la voluntad de Dios,  eso es lo que te dará o algo mejor, como dice Efesios 3:20.
Y ahora, que toda la gloria sea para Dios, quien puede lograr mucho más de lo que pudiéramos pedir o incluso imaginar mediante su gran poder, que actúa en nosotros. (NTV)
Bendiciones

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