Transforma Tu Enojo
Maribel Malavé Morales
«La mujer sabia edifica su casa;
Mas la necia con sus manos la derriba.»
– Proverbios 14:1
¿Qué es el enojo? El enojo es un estado emocional que varía en intensidad. Varía desde una irritación leve hasta una furia e ira intensa. Como otras emociones, está acompañada de cambios psicológicos y biológicos.
Todos hemos experimentado enojo en nuestras vidas, pero lo importante está en cómo, o cuán capaces somos para controlarlo y transformarlo.
Cuando la ira, el enojo, la frustración o la decepción tocan a nuestra puerta y nos domina podemos tomar malas decisiones que luego nos arrepentimos.
Muchas veces cuando esto llega nos sentimos impotentes y no encontramos salida. Hoy te tengo una buena noticia; hay salida. En la palabra de Dios, están las respuestas sabias, precisas y certeras que son capaces de transformar cualquier cosa, sin importar la situación que sea.
Te comparto algunos versículos para cuando lleguen esos momentos sepas que hacer:
Proverbios 16:32
«Mejor es el lento para la ira que el poderoso, y el que domina su espíritu que el que toma una ciudad.»
Proverbios 14:29
«El lento para la ira tiene gran prudencia, pero el que es irascible ensalza la necedad.»
Santiago 1:20
«pues la ira del hombre no obra la justicia de Dios.»
Efesios 4:31
«Sea quitada de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritos, maledicencia, así como toda malicia.»
Proverbios 15:1
«La suave respuesta aparta el furor, mas la palabra hiriente hace subir la ira.»
Proverbios 19:11
«La discreción del hombre le hace lento para la ira, y su gloria es pasar por alto una ofensa.»
Siempre recuerdo que mi madre me dijo: “cuando te cases no discutas con tu esposo, porque para pelear se necesitan dos. Si él pelea déjalo solo en lo que se le pasa el coraje.” Hoy a 29 años de casados puedo decir que fue uno de los mejores consejos, porque tiene un carácter fuerte, pero temprano aprendí que para pelear se necesitan dos. ¡Gloria a Dios!
Proverbios 14:1
«La mujer sabia edifica su casa;
Mas la necia con sus manos la derriba.»
El problema cuando no te controlas es que la mayoría de las veces arrastras a terceras personas en tu enojo y eso puede ser muy peligroso. Un momento de enojo puede provocar que se dañen relaciones que luego se hacen difícil recuperarlas. Todo por dejarte llevar por el enojo.
Eclesiastés 5:6
«No dejes que tu boca te haga pecar, ni digas delante del ángel, que fue ignorancia. ¿Por qué harás que Dios se enoje a causa de tu voz, y que destruya la obra de tus manos?»
Así que piensa y aprende a controlarte antes de actuar. No te dejes llevar por el impulso.
Hay muchas formas de apaciguar el coraje. Quizás debes salir del lugar a coger aire, escribir, leer, escuchar música o distraerte con algo que te guste. Todo eso ayudará a que no actúes de la forma impulsiva controlada por el enojo.
Te he dado muchos versículos porque ¡qué mejor que la palabra de Dios, para ayudarte a tomar la decisión correcta ante tal situación de enojo!
Proverbios 17:27
«El que retiene sus palabras tiene conocimiento, y el de espíritu sereno es hombre entendido.»
Bendiciones.
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