Llega el Tiempo de la Victoria

No se preocupe por este filisteo—le dijo David a Saúl—. ¡Yo iré a pelear contra él! 

– 1 Samuel 17:32

¿Sabías que al enemigo le gusta alardear y dar gritos, cual si hubiese ganado la batalla?  Dice un refrán pueblerino que el que da primero, da dos veces, pero en el mundo espiritual esa no es la realidad. Si hay alguien que sabe que esta vencido y está dando los últimos aletazos contra la familia, la iglesia y los hijos de Dios es precisamente el padre de mentiras, nuestro enemigo, el diablo.  

No sé si te has dado cuenta de que el ambiente huele a victoria, esperanza, restauración y posicionamiento en el Reino de Dios y su justicia.  Es un tiempo donde no tenemos temor y nos hemos levantado mirando de frente a nuestro gigante.  Ese gigante que nos había amedrentado haciéndonos pensar que, con sus armas, artillería y su gran armadura eran suficientes para hacernos retroceder.   En cambio, sin tener que utilizar la armadura de otro, hemos agarrado el objeto más sencillo y tal vez ilógico que pudiera utilizar un soldado en contra de su opresor, una simple honda y unas piedras.

Todo lo que hemos descrito apuntaría a una batalla perdida y a un hombre muerto.  Con eso también las esperanzas de un ejército oprimido de obtener una victoria.  Pero, Dios, experimentado en batallas y en casos imposibles, ha dado las estrategias de guerra para hacer caer derrotado a aquel gigante; es una muerte segura.  Es el testimonio vivo de lo que puede hacer un simple muchacho, sin mucha armadura, con la valentía y la estrategia adecuada para derribar al gigante que vive haciéndote la guerra.

1 Samuel 17:23 cuenta que mientras hablaba con ellos, Goliat, el campeón Filisteo de Gat, salió de entre las tropas Filisteas. En ese momento, David lo escuchó gritar, sus ya acostumbradas burlas, al ejército de Israel.

No temas ante las burlas del gigante.  Entiende que la burla es parte de su estratagema para hacerte creer que tu batalla está perdida.   

Este es el tiempo de la victoria donde Dios te ha llevado a conocer a tu enemigo, no para que te amedrentes, sino para susurrarte el modo en que lo vas a derrotar.

[ David mata a Goliat ] —No se preocupe por este filisteo—le dijo David a Saúl—. ¡Yo iré a pelear contra él!  1 Samuel 17:32

Alguien tiene que ir contra el gigante y ese alguien eres tú.

Si David se hubiera distraído pensando que su armadura era muy grande, su espada pesada y hubiese seguido la lógica, ciertamente hubiera retrocedido.   Es importante establecer en este punto que a pesar de que Saul contaba con un gran ejército, ninguno tuvo la valentía de enfrentar a Goliat.   Esto porque no era una cuestión de armadura, ni de cantidad de soldados.  Solo se necesitaba un hombre que confiara en que Dios podía pelear por Él y su pueblo; y ese fue David.

Hoy, hace falta una mujer u hombre que se levante a pelear por su hogar y su pueblo.  Dios ha dispuesto la honda y la piedra adecuada. Necesitamos alguien que reclame el espíritu de valentía que solo Dios da y la victoria en el nombre de Jesús para que puedas cortar la cabeza del enemigo.  Los versículos siguientes expresan la Victoria de Dios sobre nuestras vidas…

 ¿Estas listo para pelear la buena batalla?

Hageo 2:9

La futura gloria de este templo será mayor que su pasada gloria, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales, y en este lugar, traeré paz. ¡Yo, el Señor de los Ejércitos Celestiales, ¡he hablado!”».

Éxodo 14:14

Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos.

Salmos 29:11 Dios Habla Hoy (DHH)

11 El Señor da fuerza a su pueblo;
el Señor bendice a su pueblo con paz.

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