Todo se lo Debo a Él
¿Sabes cuántas veces Dios te ha cuidado y librado de males que, en ocasiones, adjudicamos a la suerte?
¿Sabes cuántas veces Dios te ha cuidado y librado de males que, en ocasiones, adjudicamos a la suerte?
Porque el vivir bajo un mismo techo no nos lleva a intimar. Intimar es hablarse, escucharse, respetarse y servirse.