Y Lo Que Dios Unió Que No Lo Separe…

«5 y dijo: “Por eso dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su esposa, y los dos llegarán a ser un solo cuerpo” 6 Así que ya no son dos, sino uno solo. Por tanto, lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre.»

– Mateo 19:6

Creo que todos hemos sido testigos alguna vez de haber escuchado a través de los pastores o sacerdotes esta declaración al finalizar una unión matrimonial. Inclusive todos esperamos este momento para poder celebrar tan importante acontecimiento.

Mientras meditaba, estas palabras saltaron a mi pensamiento (y lo que Dios unió que no lo separe el hombre). Me puse a pensar en que muchas veces además de los errores como humanos, son diferente circunstancias las que pueden hacer que un matrimonio pueda separarse.

Entonces pude identificar algunos puntos importantes que pueden ser un factor peligroso que puede afectar a un matrimonio. 

1. Los problemas financieros- La falta de mayordomía y administración de las finanzas en el hogar son uno de los problemas de los matrimonios que pueden causar la separación. Dios nos llama a ser buenos administradores de todo lo que poseemos. Es recomendable que se haga un presupuesto que ambos puedan cumplir y que combine las finanzas con la de su conyugue. Trabajen juntos para que puedan salir de las deudas. Es muy importante la colaboración de ambas partes para salir de los problemas financieros.

 La biblia nos dice en el libro de Proverbios16.20 El buen administrador prospera. ¡Dios bendice a quienes en él confían! 

2. La falta de amor- Dios nos dio una gran encomienda. La biblia nos habla de que el verdadero amor debe ser paciente, entregado, servicial, no irritante, ni presumido.

Mira lo que dice 1Corintios 13:4-5 –El amor es paciente, es servicial; el amor no es envidioso, no hace alarde, no se envanece, no procede con bajeza, no busca su propio interés, no se irrita, no tiene en cuenta el mal recibido, no se alegra de la injusticia, sino que se regocija con la verdad.

Entonces el amor no es sentir mariposas en el estómago, no es solo una emoción, sino una determinación que lleva a una acción y esta obra a favor de todos.

 Mucho de los problemas que enfrentamos como esposos/as es que se nos hace a veces difícil ceder, el solo pensar en nuestro propio bienestar, somos egoístas y en la mayoría de los casos solo pensamos en nosotros mismos. 

3. La falta de honor, honra y respeto- En una relación de matrimonio es importante ser pacientes el uno con el otro, ser serviciales, y darnos y entregarnos a la otra persona. Se disfruta el poder complacer a la otra parte. Y esto debe ser de ambas partes. El amor no solo se demuestra en palabras sino en las acciones que se tiene a diario a nuestras parejas. El como actuamos, como respondemos son clave muy importante para mantener a un matrimonio unido. El respeto, la honra a cada una de las partes son parte importante de tener un buen matrimonio.

En la biblia se le da la encomienda al marido de amar y honrar a la mujer y de tratarla con suavidad, que sea tratada como vaso frágil, no porque sean débiles, sino para que sus oraciones no sean estorbadas.  1 Pedro 3:  Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo.

Sin embargo, a las esposas se nos mandó a respetar a nuestros conyugue. En Colosenses 3:18-25 RVC

Ustedes las esposas, respeten a sus esposos, como conviene en el Señor. Ustedes los esposos, amen a sus esposas, y no las traten con dureza.

Ante las escrituras tanto el hombre como la mujer, ambos tienen unas responsabilidades primeramente para Dios y luego como individuos, trabajando juntos podrán ser efectivos para que tengan un buen matrimonio donde prevalezca el honor, el respeto y la buena mayordomía en las finanzas.

El amor hacia nuestros cónyuges es una decisión que va más allá de una emoción. Es un compromiso y un pacto. Muchas veces se tendrá que dejar los intereses personales a un lado por el bienestar de nuestros cónyuges.

Así que hombre, ama a tu mujer y tu mujer ama y respeta a tu esposo. 

El honrar a nuestro cónyuge, amarlo y respetarlo nos llevará a experimentar el reino de Dios y traerá una transformación no solo en nuestros matrimonios sino en nuestras vidas individualmente.

Si ponemos en práctica la palabra de Dios y creemos lo que la biblia dice podremos afrontar las crisis juntos con valentía, porque dos son mejores que uno y donde hay amor, compromiso, honra y respeto, tendremos matrimonios felices y prósperos. 

Hoy recuerda, que lo que Dios unió que no lo separe el hombre.

¡Bendiciones!

Reflexión Recomendada: Ayuda Adecuada