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La Vida Del Siervo

La Vida Del Siervo de Dios
Fernando Crespo Bello

Fernando Crespo Bello

Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado, decid: Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos
– Lucas 17:10
Amado hermano, muchas veces pensamos que nuestro trabajo para el Señor depende de la fe que tenemos. Pero, realmente la fe no es poder para hacer algo, sino la certeza de lo que esperamos y la convicción de lo que no se ve (Ref. Hebreos 11:1).
La definición de siervo inútil sale del mismo Jesús cuando ellos le piden que les aumente la fe. Reflejando ellos que su fe era débil y por tanto no podían orar. Entonces, Jesús les corrige diciéndole: “Si tuvierais fe como un grano de mostaza, podrías decir a este sicómoro: Desarráigate y plántate en el mar; y os obedecería “, luego cambia el tema de la fe y hace una pregunta: ¿Quién de vosotros, teniendo un siervo que ara o apacienta ganado y al volver él del campo, luego le dice: “Pasa, siéntate a la mesa”? Jesús lo hace para explicarle cómo funciona la fe y explicarle también cuál es el trabajo de un siervo. Todos nosotros somos siervos que hemos aceptado a nuestro Señor como Salvador y Señor y nuestra fe es obedecer la voluntad de Él. 
Para poder entender este concepto de lo que Jesús trata de decirle a los discípulos, debemos escuchar lo que el apóstol Pablo dice en Efesios 5:21: “Someteos unos a otros en el temor del Señor”.  Tomemos de ejemplo las tareas de un hogar cristiano, donde todos debemos estar en servidumbre al Señor. Muchas veces, los integrantes de ese hogar distribuyen las tareas en mutuo acuerdo, para que no haya la célebre frase, “Eso te toca a ti “. Por tanto; eso no es cuestión de fe, sino, de obediencia de siervo, haces lo que tienes que hacer. Desde luego, habrá momentos que tendremos que sacrificarnos por el inmenso amor que tenemos unos a otros.
Amado disfruta la vida de ser siervo sin ningún tipo de temor, porque hubo uno que tomó forma de siervo para que tú pudieras disfrutar de una eternidad. ¡Sean bendecidos!

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