[…] Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
Dios nos da un mandamiento muy importante, el cual a veces no es fácil de cumplir, porque la gente puede no tener empatía los unos con los otros. Pero, es nuestra responsabilidad hacer todo lo posible por cumplir ese mandamiento. Si te amas a ti mismo debes tener amor por tu prójimo.
En Lucas 10:30-37, Jesús relata la historia del buen samaritano. En dicha historia habla de un hombre que cayó en manos de unos ladrones, que le quitaron todo y lo dejaron a su suerte en el camino. Pasaron varios hombres por ese mismo camino, el primero que era sacerdote, lo miró y continuó su camino. El segundo hombre, un levita, también pasó por el mismo camino, lo miró y siguió de largo. Pero el tercer hombre, se le acercó, lo miró y tuvo compasión por el hombre tirado en el camino. Decidió bajarse de su caballo y vendar sus heridas, lo llevó al mesón y cuidó del hombre.
¿Qué es ayudar a tu prójimo?
Es ofrecer ayuda a una persona necesitada, es dar apoyo incondicional ante cualquier circunstancia, estar atento ante las dificultades o dolencias ajenas sin esperar nada a cambio.
El buen samaritano: (1) cuidó de un total extraño, (2) le doy los primeros auxilios, (3) Lo puso sobre su caballo, que significa que tuvo que caminar, (4) lo llevó al Mesón, (5) cuidó del hombre, (6) y pagó su cuenta.
¿Qué saco el samaritano del gesto de ser compasivo o gentil?
Nada, él ni conocía a ese hombre. La gentileza puede tener un costo, causa que sacrifiques tú tiempo, tu dinero y hasta tu energía. El samaritano lo hizo todo por amor (compasión) sin esperar nada a cambio.
La gentileza, la compasión, la simpatía o la benevolencia son frutos del Espíritu Santo.
- Gálatas 5:22-23 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
¿Por qué ser gentil?
- Dios también será compasivo con nosotros
- Es un acto de adoración
- Honras a Dios con tus actos
- Te hace sentir bien y feliz
- Hace que los demás sean también gentiles contigo
Puede que tu gesto de amor hacia tu prójimo no resulte en nada positivo para ti. Pero, Dios ve tu gentileza y el resultado será positivo para ti. Cuando decides asumir la responsabilidad de ayudar a otros sin esperar nada a cambio, Dios suplirá tus necesidades porque Dios siempre cumple sus promesas.
- Isaías 58:10-11 y si dieres tu pan al hambriento, y saciares al alma afligida, en las tinieblas nacerá tu luz, y tu oscuridad será como el mediodía. 11 Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan.
Resultado: Dios te bendecirá. Ahora, ¡Ve tú y haz lo mismo que hizo el samaritano, muestra tu misericordia por tu prójimo!
